Cuando converso con la gente acerca de la felicidad, siempre llegamos a la misma conclusión: todos la queremos. Y cuando hablamos de esto en relación al trabajo, comienzan a aparecer las dudas de su factibilidad. “Sí, es super lindo pensar en la felicidad en el trabajo. Yo puedo hacer mi parte. Pero dile lo mismo a mis jefes” o “el ambiente y las cosas que pasan todos los días, no lo permiten”, son respuestas habituales que me toca escuchar. Por eso, en este artículo, y basándome en el libro La alta rentabilidad de la felicidad de David Fischman, abordaré la siguiente pregunta: ¿Cómo hacemos para cambiar nuestro entorno para ser más felices en nuestro trabajo?
El entorno es un elemento central para nuestras percepciones y conductas. Puede sacar lo mejor de cada uno pero también lo peor de nosotros. El entorno es como un virus contagioso que muchas veces nos toca sin siquiera darnos cuenta.
El entorno, no sólo tiene que ver con las personas, sino con el espacio físico que nos rodea. Un estudio realizado en la Universidad Brigham Young, demostró que las personas que trabajan en un ambiente limpio responden con conductas más morales que las que no. Esto sólo a modo de ejemplo. Les aseguro que todos disfrutamos de un ambiente limpio, luminoso, agradable, que nos haga sentir mejor donde quiera que estemos.
¿Cómo es tu lugar de trabajo? ¿Cómo podrías mejorarlo? Quizás con un buen aroma, flores frescas o fotos que sean importantes para ti. Mantén un ambiente ordenado (el orden exterior ayuda a mantener un orden interior). Ocúpate de armar un espacio que te provoque emociones positivas. Las personas que experimentan estas emociones suelen ser más creativas, producen más y tienen mejores relaciones interpersonales.
Si es posible, invita a tu equipo a hacer cosas agradable e incluso insólitas o ridículas como por ejemplo “el día de la pantufla”. Inventa actividades que generen un grato ambiente y crea un espacio con sonrisas. Verás como todo fluye mejor y logras mayor compromiso con la empresa. Ahora bien, hazlo como algo permanente incorporándolo en la cultura de tu empresa. No creas que porque lo haces una vez generarás un cambio real. Una vez será sólo una anécdota para recordar.
Lo que somos y lo que hacemos no dependen exclusivamente de lo que ocurre en nuestro mundo interior. Siempre estamos rodeados de un entorno que nos modifica. Para bien o para mal. ¡Incluso la persona más positiva y motivada puede contagiarse de mal ánimo cuando es lo que predomina en el ambiente!
Te invito a realizar cambios. Invita también a tus compañeros. ¡Nada mejor que un rico ambiente en el espacio en el que pasamos gran parte de nuestro día!
Publicado el día 27 de noviembre de 2013 en http://asexma.cl/modifica-tu-entorno-y-crea-felicidad-en-tu-trabajo/